Con una liturgia que congregó a estudiantes, docentes, administrativos y jesuitas, celebramos hoy, miércoles 31 de julio, el Día de San Ignacio de Loyola. Presidió la ceremonia el P. Ismael Aracena S.J., Capellán de nuestro Colegio, quien acompañado por el P. Dagoberto Lagos SJ, nos hizo una invitación. “Hoy, 31 de julio, es una buena oportunidad para preguntarnos cómo tú y yo podemos vivir el espíritu de nuestro colegio. Hoy llegamos con tres palabras ignacianas, la del pedir, la del buscar y la del llamar”. De esta forma, en su mensaje destacó que “la máxima ignaciana que definen estas tres palabras no es solamente una idea, un deseo, sino que la gran inspiración de todos nosotros. Pedir, pedir amar y ser cercanos a todos los hombres y mujeres que algún día se encontrarán con nosotros, con amistad, con pasión, con compasión y ojalá con mucho respeto”.

Finalmente, llamó a todos los Ignacianos e Ignacianas a ”servir en lo cotidiano, en todo. Ignaciana busca servir en las palabras y en los gestos, en los silencios y en las miradas. Ignaciano llama para servir y ojalá da la vida cada día. Ignacio de Loyola pidió, buscó y llamó a Jesús para más amarle y seguirle”. 

En este contexto y como ya es una tradición en nuestro Colegio, hoy damos inicio al Tiempo Ignaciano, que se extenderá hasta el 18 de agosto, Día de la Solidaridad, en que recordamos a San Alberto Hurtado. Bajo el lema“Pidan, busquen, llamen” , dedicaremos un espacio privilegiado, para orar, celebrar, reflexionar, conocer y dejarnos impactar en nuestro actuar por lo que nos distingue: la espiritualidad ignaciana.